Exemplos do corpo de texto para ministerio de la Gobernación
1. Cuando ejercía el cargo de gobernador militar de Valencia acabó disgustado por la corrupción policial, la represión y las actividades incontroladas de los arribistas de Falange en el Ministerio de la Gobernación.
2. El régimen necesitaba cuerpos para alimentar aquella enorme cripta, cuya construcción se demoró 20 años, y el Ministerio de la Gobernación los pidió por carta a ayuntamientos de toda España, rogando además, que respondieran "con la mayor brevedad posible". Muchos municipios contestaron que no tenían muertos del bando nacional, pero sí "fosas del ejército rojo". Y Franco cambió su criterio inicial.
3. Muy pocos historiadores han investigado el traslado de víctimas de la guerra civil al Valle de los Caídos, hecho del que existen pocas referencias bibliográficas a pesar de que fue una operación a gran escala diseñada desde el ministerio de la Gobernación a partir del 30 de diciembre de 1'57, que es cuando hay constancia documental de una primera referencia oficial al traslado de restos mortales.
4. El régimen necesitaba cuerpos para alimentar aquella enorme cripta y el Ministerio de la Gobernación los pidió por carta a ayuntamientos de toda España, rogando, además, que respondieran "con la mayor brevedad posible". Muchos municipios contestaron que no tenían muertos franquistas, pero sí "fosas del ejército rojo". "A los ayuntamientos les venía muy bien, porque las fosas de republicanos les quitaban espacio e impedían muchas veces ampliar el cementerio municipal.
5. El problema fue resuelto cuando el Ministerio de la Gobernación pidió su colaboración a numerosos ayuntamientos de toda España y muchos municipios contestaron que no podían disponer de muertos franquistas, pero sí de los que estaban en las "fosas del ejército rojo". El hijo de uno de aquellos siete fusilados en Aldeaseca jura que no descansará "hasta llevarme a mi padre y a sus seis compañeros de vuelta a casa". El porqué de esa determinación lo explica el nieto de otro soldado republicano, llamado Joan Colom, que murió de tifus en una prisión de Lérida y cuya viuda siempre creyó que estaba enterrado en una fosa común en el cementerio de la ciudad, por lo que ella y sus hijos iban allí a menudo a llevarle flores.